Ingredientes
1 Kilogramo de Tallarines
6 Unidades de Pollo sin piel
1 Unidades de Zanahoria mediana
2 Cuchara sopera de Pasta de Tomate
1 Sobre de Ketchup mediano
2 Unidades de Cebolla
1 Vaso pequeño de Vino tinto semidulce
1 Taza de Aceite vegetal
1 Cuña de Queso parmesano
2 Hoja de Laurel
1 Pizca de Orégano
4 Diente de Ajos
1 Pizca de Sal
1 Pizca de Pimienta
1 Pizca de Comino
1 Tarro de Hongos secos (remojarlos 30 minutos)
2,5 Litro de Agua
1 Taza de Agua Fría
Preparación
Si no dispones de tallarines no te preocupes, puedes sustituirlos por espaguetis. El resultado será igual de bueno puesto que son dos tipos de pasta muy similares e, incluso, en algunos países los confunden.
Para empezar con la preparación, pon en una olla los 2 litros y medio de agua, añade las dos hojas de laurel, una pizca de sal, y ponlo a calentar.
Cuando hierva, añade los tallarines y cuécelos hasta que estén al dente. El tiempo de cocción es muy importante que la pasta no quede ni demasiado dura ni se pase de blanda.
Una vez cocidos los tallarines, viértelos en un colador y escúrrelos. Al momento de escurrirlos deja caer agua fría para lavarlos un poco y evitar que se peguen.
Puedes colocar el colador sobre la olla para que se vaya escurriendo bien la pasta. Mientras tanto, prepara el aderezo. Para ello, coge otra olla aparte y añade el aceite la cebolla corta en cuadraditos muy pequeños, los ajos, la pimienta y el comino al gusto. Cocínalo a fuego lento hasta que se doren los ingredientes.
Cuando estén ligeramente dorados, añade los trozos de pollo sin piel y los hongos secos previamente remojados para eliminar cualquier resto de suciedad.
Pruébalo para saber si le falta sal y añade si es necesario. Incorpora un poco de orégano previamente tostado colocándolo en tus manos y frotándolas para desmenuzarlo. El aderezo no debe salir aguado, ha de tener cierta consistencia.
Cuando tengas la salsa roja lista, sirve los tallarines blancos en el plato, vierte un poco de salsa por encima y espolvorea el queso parmesano.